Una montaña sin nombre

 

Una montaña sin nombre 

 

Una montaña sin nombre

se alza, allá, entre los cerros

—y si llega a tener nombre,

¡ah, yo no quiero saberlo!

 

Un pajarito sin nombre

vuela encima de las copas

—y si llega a tener nombre,

yo digo, ¡ah, no me importa!

 

Una nube pasajera

anda, sin nombre, en el cielo

—y si llega a tener nombre,

digo, ¡ah, no lo recuerdo!

 

Y así ando, yo, sin nombre,

viendo pájaros en vuelo,

mirando montañas solas

y nubes, allá, en el cielo

—yo solía tener nombre,

ahora, ¡ah, no lo tengo! 

 

Douglas Wright

¡Ah, mis poesías chicas!

 
¡Ah, mis poesías chicas!  
 
¡Ah, mis poesías chicas,
esperando algún lector
que las lea con ternura,
que las lea con amor! 
 
(Mis versitos chiquititos,
como pétalos, nomás,
de flores que están adentro,
digo al fondo, digo atrás.) 
 
¡Ah, mis poesías magras,
esperando ser leídas
por alguien que las reciba
tal como soplos de vida! 
 
(Mis versitos diminutos,
unas coplitas, apenas,
de aquello que anda en mi alma,
de aquello que anda en mis venas.) 
 
¡Ah, mis poesías pobres,
esperando quien las lea
con un alma comprensiva,
con un alma compasiva,
digo, con el alma abierta!  
 
Douglas Wright 

Sucursales de la luna

 

Sucursales de la luna

(en mil charquitos de agua) 

 

¡Ah, la luna se refleja

en mil charquitos de agua!

—una luna, mil reflejos,

mil lunitas reflejadas.

 

En mil charquitos de agua,

¡ah, la luna reflejada!

—sucursales de la luna,

así me gusta llamarlas.

 

¡Ah, la luna se refleja

en mis ojos, como charcos

—sucursales de la luna

en mí mismo, aquí abajo!  

 

Douglas Wright

La ruta del pajarito

 

La ruta del pajarito 

 

La ruta del pajarito,

su camino, su sendero,

tan invisible y etéreo,

sin embargo, tan certero.

 

La ruta del pajarito,

su camino por el cielo

lo va haciendo su volar:

¡su camino es su vuelo!

 

La ruta del pajarito,

imposible de seguir,

seguir su ruta, yo creo,

es andar como volando,

es volar en mi vivir. 

 

El viejo Now

¡Multi-realidad-cambiante!

 
¡Multi-realidad-cambiante! 
 
(Acerca de la "sensación"
que tuve en un sueño...) 
 
Otra vez ando en un sueño
—soñando que voy andando,
soñando que voy flotando
tras una forma que cambia,
se transforma, va mutando.
 
En el fondo, unos diseños
de unas formas muy variadas
—cada forma es un estado:
¡estados de realidad,
realidades separadas!
 
Los diseños van mutando
—cada uno se hace otro,
y otro y otro, y otro más—,
cambiando formas y estilos,
cambiando estados y modos.
 
Entonces voy transitando
esta multi-realidad:
¡multi-realidad-cambiante!
—multi-realidad-mutante—,
en la que yo voy flotando, 
dele volar y volar. 
 
Douglas Wright

En sueños-18, El sueño en el que ando en una multi-realidad-cambiante

 
En sueños-18
 
El sueño en el que ando en una multi-realidad-cambiante
 
 
Viernes 17 de marzo de 2023. 
 
 
El de anoche fue una especie de sueño-sensación, diría.
 
Algunos de mis sueños (los sueños que transito) son ARGUMENTALES (situaciones y personajes).
 
Otros son fuertemente VISUALES (con esos lugares muy llamativos que yo llamo LOCACIONES).
 
Hace unos años comenzaron a aparecer sueños TÁCTILES (en los que la sensación de pisar algo o tocar algo era muy fuerte, intensa, vívida).
 
Más recientemente, las sensaciones OLFATIVAS y AUDITIVAS aparecieron en mis sueños, en mi soñar. 

 
En el de anoche, lo destacable fue la SENSACIÓN en sí. No visual, olfativa, etcétera, sino una SENSACIÓN TOTAL, digamos (una que abarcaba todo mi ser).
 
La sensación de estar en un estado de realidad diferente, tal vez, de ESTAR EN OTRO ESTADO DE REALIDAD, quizá.
 
Estoy como en un “pattern”, una trama (como flotando en una pecera, tal vez —o en el escritorio de la pantalla de mi computadora, entre todos esos iconitos...) con un montón de formas, diseños de fondo.
 
Por ahí va flotando un pececito (como calado en madera, a lunares) y yo lo voy siguiendo (como flotando también). Y lo veo siempre de atrás.

 
La cuestión es que el pececito (calado) va cambiando de forma a medida que nada, que flota.
 
Va mutando instantáneamente y tomando otras formas (que ya no recuerdo).

 
También las formas del fondo, esos diseños, van cambiando.
 
Pero no solo cambian de forma sino de estado. No son solo cambios de aspecto sino algo más profundo, más esencial.
 
Como si cambiaran de un ESTADO DE REALIDAD a OTRO.
 
Como si cada forma-diseño fuera un ESTADO DE REALIDAD que se va transformando en OTRO ESTADO DE REALIDAD.

 
¡Uf!... Difícil de explicar.
 
Entonces voy flotando por una especie de MULTI-RELIDAD-CAMBIANTE, y esta es la SENSACIÓN (fuerte, intensa) que estoy tratando de describir ahora, de este lado, ya despierto.

 
Por eso digo que a diferencia de los sueños ARGUMENTALES, VISUALES, etcétera, éste fue SENSACIONAL.
 
La SENSACIÓN de estar navegando, volando, flotando, siguiendo a una forma que va cambiando, en un fondo, entorno, contexto de Muchas Realidades, todas y cada una, a su vez, cambiando.
 
Una infinidad de Realidades Cambiantes.
 
Y yo, con una sensación de alegre cosquilleo, de alegría, de bienestar, de plenitud, flotando por ese espacio, por ese ámbito, por ese contexto (no sé cómo llamarlo), por esa Dimensión, tal vez.
 
Donde lo que cambia no son solo las figuras sino los fondos.
 
Muchos, infinitos, todo el tiempo cambiando en otros.
 
Alegremente. Juguetonamente. Divertidamente.
 
Tengo la sensación de haber tenido un "glimpse", un atisbo de La Realidad (de cómo es, en realidad, La Realidad).
 
Y la SENSACIÓN, la VIVENCIA, fue HERMOSA. 
 
 
Douglas Wright 
 

Religioso independiente

 
Religioso independiente 
 
"¿No creyente?, ¿no creyente?
—como decía Thoreau—:
religioso independiente."
 
"No pertenezco a niguna
religión organizada
—así decía Walt Whitman—-
y espero que todas tengan
sus grandes puertas abiertas
y me permitan entrar,
y me permitan la entrada."
 
Supongo que así anda el viejo
—digo, anda el viejo Now—:
en la iglesia de los días,
en el templo de las noches,
con el sol y las estrellas,
con el cielo, con las nubes,
¡digo, con el día de hoy! 
 
Douglas Wright

Delirios de viejo Now

 
Delirios de viejo Now 
 
Ando reventando vientos,
ando ennegreciendo nubes,
ando sopapeando sapos
que por las paredes suben.
 
Y torturando tortugas,
y manoteando mitones
—de a poquitos, de a montones—,
y transitando en trencitos
—de esos de tres vagoncitos—
los espacios siderales,
los espacios infinitos.
 
Ando reventando lunas,
ando ennegreciendo cielos,
ando fustigando fuegos
y desbordando calderos.
 
Tartamudeando tertulias 
picaporteando portones
—con manoteados mitones—,
invirtiendo en desventuras
—revirtiendo mis ahorros—,
gastando pobreza a chorros,
de a montones, de a millones. 
 
El viejo Now

Una ola me saluda

 

Una ola me saluda 

 

Una ola me saluda,

cada día, con su "hola";

una ola me salpica,

con su "hola", cada hora.

 

Una ola me levanta

por el aire con su espuma;

una ola con espuma

hecha de sol y de luna.

 

Una ola me saluda

y yo saludo a la ola;

le digo "hola, buen día",

le digo "buen día, ¡hola!". 

 

El viejo Now

Entre la luna y el sol

 
Entre la luna y el sol 
 
El sol la alumbra a la luna, 
la luna lo alumbra al sol,
y aquí estoy yo, entremedio,
alumbrado por los dos.
 
De día, me alumbra el sol,
de noche, sueño con lunas,
soles brillantes me alumbran,
lunas brillantes me acunan.
 
El sol alumbra mis días,
la luna alumbra mis noches,
y yo, entremedio, alumbrado
—y yo, entremedio, asombrado—,
¡viajando en tren de primera,
viajando en el mejor coche! 
 
El viejo Now

¡La pelotita amarilla!

 
¡La pelotita amarilla! 
 
¡Cómo salta, cómo brilla
la pelotita amarilla!;
anda metros, anda canchas,
anda horas, anda millas.
 
La pelotita amarilla
es como un sol afelpado,
como un sol en miniatura
que salta por todos lados.
 
¡Parece que tiene vida
la pelotita amarilla!;
el encordado, parece,
como que le hace cosquillas.
 
La pelotita amarilla,
redondita y compañera,
anduvo siempre conmigo,
¡qué digo, la vida entera!
 
¡Cómo salta, cómo brilla
la pelotita amarilla!;
desde que era solo un niño
con raqueta de madera
y la pasión por el tenis
era solo una semilla. 
 
Douglas Wright 
 
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Juego en unas canchas del Parque Sarmiento
que están llenas de rajaduras (¡cráteres, algunas!)
y que hacen que uno esté alerta a lo "inesperado"
("expect the unexpected", decía alguno). 
 
"Un aprendizaje de vida", tal vez.