¡Justo a mediados de enero!
¿Cómo no voy a
sentarme
frente a “Quique, el
quinotero”?:
¡su tercera
floración,
justo a mediados de
enero!
¡Llena todos los
espacios
con su perfume de
azahares;
llena todos los
rincones,
llena todos los
lugares!
Revolotean las
abejas
sobre sus flores
abiertas;
van y vienen,
vienen, van,
atareadas y
despiertas.
¿Cómo no voy a
sentarme
a mirarlo al
quinotero?:
es mi modo de
decirle
“gracias por tus
flores blancas,
por tu perfumado
aroma,
por tus abejas y
avispas
y, quizá, una
mariposa”;
es mi modo de
brindarle
un silencioso “¡te
quiero!”.
El Jardinero Mágico
No hay comentarios:
Publicar un comentario