lunes, 22 de abril de 2024

El pajarito, en el cielo

 
El pajarito, en el cielo 
 
El pajarito, en el cielo,
no dejó ninguna huella,
sin embargo, aquí, en mi mente,
quedó su huella estampada
como un sendero en la hierba.
 
El pajarito, en el cielo,
no dejó huella alguna,
sin embargo, aquí, en mi mente,
yo veo su huella clara
tal como el surco que deja
un barquito en la laguna.
 
El pajarito, en el cielo,
no dejó ninguna huella,
sin embargo, aquí, en mi mente,
veo su huella tintineante
brillando como una estrella. 
 
El viejo Now


 
----
Bonus 
 
A veces no quedan huellas en el mundo físico de ciertos sucesos o eventos, pero sí quedan huellas en "mundos" más sutiles (como el mental o el emocional, por ejemplo).
 
Huellas que, aunque no se "ven" con los ojos físicos, se "sienten" con los ojos de la mente o del alma (con igual o mayor intensidad, quizá).
 
Un pajarito voló sobre el cielo de mi balcón y, aunque en el cielo no quedó ninguna huella, yo pude trazar el recorrido exacto de su vuelo sobre mi hoja de papel.
 
Y así, del mismo modo, han quedado grabados los recorridos de ciertos eventos de mi vida en la hoja de papel de mi mente, de mi alma.
 
Cosas de dibujante, tal vez... 
 
DW
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario